Con un cielo impecable como en pocas ocasiones, partimos desde Calacalí hacia el centro del cráter del Pululahua.
El sol de la primera hora de la mañana calienta el aire y hace de esta ruta una fabulosa experiencia.
El paisaje es imponente, atras de los ciclistas el crater con el domo central (Pondoña) y todo el borde del enorme cráter en cuyo interior se acogen varios valles habitados.
No podía faltar, un arazo de tal magnitud que rompio tubo y llanta.
Al fondo del crater, en el cruce de caminos, nos reagrupamos mientras Guillermo curaba los raspones de su arrastrón.
El río cristalino que desborda el cauce para invadir el camino.
Un pintoresco sendero nos lleva hasta la hostería, a la que tambien se puede llegar por otra vía de vehículos.
La casa del restaurante en la hostería.
Unas fotos del grupo antes de iniciar el ascenso.
Un lugar de paz en el centro del volcan es la Rinconada de Rolando Vera Rodas.
Y a partir de aquí, con un sol canicular al medio día el ascenso se hizo muy retador.
A algunos ciclistas nos costó un importante esfuerzo llegar hastas el portal de Moraspungo pues es muy facil deshidratarse en un clima como el que hizo este fin de semana en el sector.. Mientras tanto en el sur de Quito se presentaba una tormenta con granizo que hizo mella.
Gracias a todos quienes acudieron al llamado. Entendemos a quienes compitieron en el Rey e la Montaña que no pudieron acompañarnos y a los ciclistas del grupo que hicieron ruta. Nos veremos pronto.